Se compra una piña que esté en su punto...
Luego un poco de buén jamón serrano...
Se acompaña con queso y unas tostaditas...
Y el resultado de todo ello es una buena cena.
Pués lo mismo en el cine, los ingredientes deben ser de buena calidad y en abundancia (que duren antes, durante y después de la película y que salgas del cine satisfecho).
PD Post dedicado a la polémica de los cocineros, iros a tomar el pelo con vuestros platos de diseño a otro país, viva la calidad y cantidad a un precio razonable, no a las tomaduras de pelo.
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